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Denia, un paraíso que no te puedes perder

Siempre tenemos un lugar de vacaciones favorito. Puede ser el norte, sur, montaña, playa…lo que sea. Pero ese sitio en el que nos gusta estar, que le hemos cogido mucho cariño y que siempre intentamos hacer un hueco en nuestra agenda para visitar. Ese sitio que siempre recomendamos a nuestros amigos, aunque es cierto que no mucho, porque no queremos que se masifique.

Ese sitio que ya hemos cogido confianza con su gente, que tenemos hasta amigos. Restaurantes fijos para ir a comer y bares donde nos gusta tomar la cañita y preguntar al camarero. Ese lugar al que vamos y tenemos que analizar cómo ha ido evolucionado cada verano. Pues bien, esto lo tenemos claro, y en mi caso, ese lugar es Denia.

Y como suele ocurrir en estas cosas, mi pasión por Denia fue por casualidad. Buscando sitios para ir un verano a última hora encontramos un alquiler barato en Romer Playa. De ahí pasamos a un alquiler de 15 días, otro año de un mes..y finalmente hablamos con ellos para buscarnos un apartamento en venta. Y así fue. Ahora tenemos nuestra propia vivienda en Denia, donde ya podemos disfrutar de hasta nuestro bebé Son ya más de 15 años de disfrute.

Nos situamos. Denia está situada en la costa norte de la provincia de Alicante. Se trata de la capital de la comarca de la Marina Alta. Contaba con 42.953 habitantes censados el 1 de enero de 2021 (INE), pero en verano su población puede llegar a quintuplicarse, llegando a los 200.000. Ahí es donde me incluyo yo. Es el municipio de España de menos de 50.000 habitantes que más veraneantes recibe según las cifras de población estacional del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y la verdad es que no me extraña porque es mi paraíso.

Y si por algo se caracteriza esta tierra es por su excelente tiempo. El clima de Denia es especialmente suave y plácido, con una media anual de 18 °C. Denia tiene una media de precipitación de 500-600 mm, aunque no hay datos oficiales que lo corroboren. Los inviernos son cortos y apacibles y, los veranos, largos y cálidos. De hecho, tan suave y plácido es el clima de Denia que hasta hay un monumento en la propia ciudad alabando su bonanza climática. Yo que voy huyendo del frío de Castilla, es para mí un paraíso.

Qué ver

El Castillo de Denia  es el principal elemento de turismo que se puede ver. Está en el punto más alto de la ciudad. Por una módica entrada, podrás disfrutar de esta fortaleza de origen islámico, construida entre los siglos XI y XII. Tuvo un papel fundamental como defensa ante los ataques piratas, y siglos después se le fueron incorporando nuevos elementos en función de la época histórica, hasta perder su función a finales del siglo XIX.  La verdad es que es el típìco recuerdo que siempre mantienes en tu mente.

Pero lo que más me gusta es pasear por el centro de Denia. Por sus callejuelas que rodean la colina del castillo. En la plaza de la Constitución, donde se sitúan el ayuntamiento y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, comienza la calle de Loreto, principal vía del centro histórico y eje gastronómico de la localidad. Junto a ella, las calles Mayor, Sant Josep y Cavallers merecen también un buen paseo. Siempre recuerdo que mi pareja y yo nos tomábamos un helado y damos vueltas de más de dos horas.

Y por supuesto, no puede faltar mi playa favorita. Denia tiene unos 20 kilómetros de costa con varias playas que se extienden en todo este litoral, divididas en dos sectores: Les Marines (al oeste del centro) y Les Rotes (al este). La principal playa del municipio es la playa de Les Marines, un arenal de 3 kilómetros de largo que parte del barrio de Baix la Mar hasta la playa de Les Bovetes. Donde mejor me lo he pasado. Aunque ahora que somos familia, vamos a la playa de Les Marines, que es ideal para familias gracias a su arena fina, su amplitud y los numerosos servicios con los que cuenta, como hamacas, vigilancia, baños, piraguas y otros juegos de agua.

Qué comer

Y este lugar es el paraíso para comer con algunos restaurantes que merecen un premio. El arroz, el pescado y el marisco, especialmente la reconocida y popular gamba roja hervida. La cazuela marinera (suquet), tortas, espencat, alioli, llandeta, pulpo seco, gambas con acelgas, etc. La mistela y las pasas son la base de una excelente gastronomía, a lo que hay que añadir los cítricos.

Y este es mi sitio del que estoy enamorado, y al que os invito a todos. No os vais a arrepentir.

 

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